viernes, 22 de diciembre de 2017

ESPERANDO A MISTER BOJANGLES, de Olivier Bourdeaut

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SINOPSIS:


Celebrada con un entusiasmo desbordante por la crítica y los libreros franceses, que la catapultaron al primer puesto en las listas de libros más vendidos en 2016, esta hermosa novela hipnotiza al lector no sólo con sus imágenes de tintes surrealistas, sino también por el sentido del humor y una sutil melancolía que emana de sus páginas acorde con la canción que ha inspirado el título.
Un texto que arranca con un tono de engañosa frivolidad y que, conforme avanza el relato, casi imperceptiblemente, va calando en las zonas más sensibles del espíritu hasta culminar con una emoción intensa y profunda.

Ante la mirada absorta de su hijo, una pareja embriagada de amor baila al son de Mr Boangles, de Nina Simone. La escena, mágica, vertiginosa, sólo es un recuerdo más de los muchos que brotan de la memoria del protagonista de la historia, que rememora una infancia marcada por la excentricidad de unos padres adscritos a un estilo de vida ajeno a toda convención social. El padre, la vitalidad hecha persona, no concibe una vida sosegada y monótona-hasta el punto de "rebautizar" a su mujer con un nombre diferente cada día-, y la madre, capaz de interpretar todo tipo de papeles con la convicción del ilusionista más avezado, hace de la rutina familiar una fiesta perpetua, un espacio donde sólo caben el gozo, la fantasía y la amistad. Sin embargo, poco a poco, empieza a entreverse que este universo lleno de poesía, de quimeras, de momentos maravillosos, se asienta sobre un precario sentido de la realidad, y que, cuando las canciones y los sueños toquen a su fin, el derpertar puede ser muy doloroso.

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Cuando la magia nos envuelve, a través del baile y del amor, solo podemos dejarnos llevar por lo que sentimos en cada momento. Y magia es lo que me transmitió esta novela.
Me ha fascinado desde el primer párrafo. Es una novela un tanto extraña, porque te envuelve en un sinfín de sentimientos: tristeza, compasión, amor, ternura, sorpresa, pero jamás te mantiene indiferente.

Con una prosa cuidada al máximo y un estilo ameno y asombroso, el autor nos introduce en la vida de un peculiar matrimonio, a través de la visión de su hijo. La manera en la que Olivier Bourdeaut ha desarrollado una historia tan intensa en tan pocas páginas (pues solo son 147) me ha sorprendido mucho y ha logrado que afloren abundantes emociones con su lectura.
A primera vista, parece una prosa simple, pero a medida que nos adentramos en cada capítulo, nos damos cuenta de que el lenguaje está repleto de giros inesperados y recursos sorprendentes.

Creo que Olivier Bourdeaut ha confeccionado con gran maestría una narración que no solo engancha y gusta de principio a fin, sino que, aún después de leer la novela te la devuelve a la memoria cuando menos lo esperas, y surge un sentimiento de añoranza y ternura hacia los personajes que la componen, que son básicamente el matrimonio con su hijo.

Es un libro extraordinario, reflexivo, en el que el autor nos muestra que no debemos dar nada por sentado, que todo lo que imaginamos o juzgamos de otras personas y de otras situaciones escapa a nuestro verdadero conocimiento y no debemos sacar conclusiones precipitadas.
Una novela muy recomendable.